Inventan fuerte accidente para asaltar en Tuxtla
Por Amir
Hernández
Conocido arquitecto
chiapaneco fue atracado por varios sujetos a bordo de un taxi en el Libramiento
Norte Oriente de Tuxtla Gutiérrez, frente a una gasolinera y Torre Chiapas, donde
con la presunta participación de policías de Tránsito reclamaron un falso
accidente automovilístico.
El
denunciante señaló que a las 11:30 horas del pasado sábado transitaba en el
libramiento a bordo de un Nissan Altima y justo cuando se disponía ingresar a
la gasolinera fue interceptado por el taxi capitalino con severos daños en su
carrocería.
Frente a
decenas de personas que atestiguaron el grave ilícito, los tripulantes del taxi
descendieron pidiendo una ambulancia, se colocaron frente al profesionista, patearon
su auto, comenzaron una lluvia de improperios, amenazas en su contra y reclamos
para exigirle el pago de daños y lesiones, sin que él estuviera involucrado en el
accidente del que se le acusaba.
“Se trata
del taxista, un hombre, una mujer y dos niños, uno lactando y otro de unos 10 u
11 años que estaba llorando y muy espantado por los gritos de esas personas. Me
exigieron que resarciera los daños y pagara las lesiones causadas”, agregó.
Argumentó
que mostró que su vehículo estaba intacto, pues él no había causado los daños
en las partes laterales y frontales del taxi. Sin embargo, la escena de
amenazas e improperios persistieron.
Al lugar de
los hechos arribaron agentes de Tránsito Municipal a bordo de una patrulla, el
oficial que cuidaba ese crucero y el dueño del taxi, quien llegó directamente a
donde estaba el hoy agraviado y le exigió que pagara los daños, sin que checara
la hojalatería dañada de su taxi, mucho menos preguntara por el chofer o los pasajeros.
Los agentes
de inmediato comenzaron con su ordinaria logística: “Más vale que se arreglen
aquí, de lo contrario los vehículos serán llevados al corralón y puestos a
disposición del Ministerio Público. Hoy es sábado, el domingo no trabajan y el
lunes hay puente y en el encierro le pueden desvalijar su auto”, refiriéndose sólo
al denunciante.
Ante la
necedad de sus inculpadores y omisión de los agentes, el automovilista, con el
fin de salvar su lujoso Altima, optó por pagar a sus acusadores tres mil 500
pesos, que retiró de un cajero automático, para lo cual fue llevado por el
patrón del taxista. Tras “la expiación de la absurda culpa”, todos se fueron
del lugar.
Ayer la
Secretaría de Tránsito Municipal informó que los agentes que asistieron a ese
hecho están plenamente identificados y reconoció que nunca reportaron el caso
ante sus mandos superiores.
Ignacio
González Moreno, director de Infracciones, confirmó que los agentes que
conocieron o participaron en ese “atraco” no solicitaron la presencia de un
perito, por lo que van a proceder en su contra, aunado a las presiones y
amenazas psicológicas que ejercieron en contra del particular, por lo que
solicitó a éste acudir a sus instalaciones para levantar la denuncia y el
ilícito no quede impune.
A los
agentes se les exige registrar todos los accidentes de tránsito, incluso los
hechos minúsculos, por lo que éstos conocen las características de la unidad,
así como los nombres del taxista, el patrón de éste y el de los pasajeros que
participaron en este “atraco”.
La versión
del automovilista fue corroborada ayer por empleados de la gasolinera, quienes
fueron testigos de los hechos.
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