Villaflores desacató orden de Semarnat

Por Amir Hernández

La denuncia de presunto ecocidio en la Reserva de la Biosfera de La Sepultura que hicieron la semana pasada ocho comunidades de Villaflores, ya está en manos de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), que en breve determinará sobre el desacato que hizo el Ayuntamiento a una orden de Semarnat que prohibió explotar un manantial para llevar agua a la llamada “Ciudad de las Gardenias”.

Autoridades gubernamentales revelaron ayer que la denuncia por “ecocidio” presentada por ejidatarios de Unión y Progreso, Cristóbal Obregón, Buena Vista, Agrónomos Mexicanos, Melchor Ocampo, Tenochtitlan, Nuevo México y Nueva Esperanza, así como por productores y campesinos de varias rancherías afectadas, es investigada por Profepa.

Según las primeras investigaciones, el Ayuntamiento transgredió el dictamen de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) que negó la explotación de un manantial en el ejido Nuevo Esperanza, dentro de la mencionada reserva ecológica, que contempla el proyecto de agua potable iniciado por el edil Germán Jiménez Gómez.

“El problema es que el Ayuntamiento no respetó un dictamen federal, está afectado el medio ambiente y el abastecimiento del líquido en esas comunidades”, explicaron.